La T.V. de realidad llega a la música

David Bisbal, Chenoa y otros, se convierten en grandes figuras de la canción

Los nuevos talentos surgen por todos lados. Algunos desde que nacen, parecen estar destinados a la fama, sin embargo, una característica especial de la primer década de este siglo ha sido la aparición de programas que han buscado precisamente a esos nuevos artistas, con diferentes resultados, pero dejando muy buenos ejemplos, de cantantes que se han convertido en líderes de ventas.

Uno de los máximos ejemplos internacionales de este caso es David Bisbal. El cantante quedó en segundo lugar dentro del programa Operación Triunfo, en su primera edición en el 2002. Bisbal consiguió con esta emisión el contrato de una casa discográfica, y lanzó un disco que se convirtió en todo un éxito, vendiendo varios millones de copias a nivel internacional, en lo que sería el inicio de una carrera que a la fecha es muy exitosa.

Llenos totales en sus conciertos, no sólo en España, sino en otros mercados como Estados Unidos, México, Centro y Sudamérica, han demostrado la popularidad del cantante almeriense, causando emoción por sus canciones, sus interpretaciones, sus movimientos, y su imagen, que hace poco más de un año dejó sus rizos por un cabello más corto, sin disminuir el atractivo para sus seguidoras.

En este mismo reality show, que se convirtió en el programa más visto en la televisión de España, surgieron otros talentos. Curiosamente, la ganadora del mismo, Rosa, es quien menos ha despegado a nivel internacional, en parte por los problemas personales que la artista ha enfrentado.

Chenoa, que en su tiempo fue novia de Bisbal, se hizo famosa en los mercados externos a España, precisamente por la relación con el cantante. Sin embargo, en España, ella fue todo un éxito desde su aparición en dicho programa. Su primer disco se convirtió en uno de los más vendidos en este país, un gran inicio que ahora ya va por su cuarta producción discográfica Absurda cenicienta.

El sonido de esta cantante, que con todo y el esfuerzo se ha colocado como una de las favoritas ya no sólo de España, sino también de Latinoamérica, es una propuesta pop fresca, que al menos en su más reciente producción, deja a un lado el sufrimiento, para optar por temas positivos y llenos de alegría y esperanza.

También del popular reality show español, surgió David Bustamante, quien quedó en el tercer lugar del concurso, gracias a su carisma, su voz, y también su galanura que dejó emocionadas a muchas mujeres que lo colocaron como uno de los favoritos en su país natal.

Actualmente promueve su quinto disco Al filo de la irrealidad, que bajo la producción de Kike Santander, trae a Bustamante con un sonido más “latino”, junto con letras de su propia inspiración, y el romanticismo a flor de piel.

En México, algunos programas de este tipo han generado varias estrellas. Algunas han tratado de perdurar, aunque no todas han corrido con buena suerte.

Uno de los ejemplos más recientes de este tipo es la creación de La Nueva Banda Timbiriche, que surgió de un programa al cual asistió una gran cantidad de jóvenes con el deseo de ocupar un lugar en el grupo, que pretende repetir el éxito que tuvo la agrupación original en los ochenta.

Después de varios meses, Fernanda, Alberto, Gaby, Eduardo, Taide, Yurem y Brissia (quien por cierto, acaba de dejar al grupo), fueron elegidos por el público, los “jueces” y hasta por los mismos Timbiriches originales, como los integrantes de “La nueva banda”.

Por ahora ya son un éxito en México gracias a su primer sencillo Tú, tú, tú; y empiezan a colocarse en otros mercados latinos. Habrá que ver si con los cambios que ya existen en su alineación pueden continuar y convertirse en un grupo de importancia, como ha ocurrido anteriormente con otras bandas.

La televisión puede ayudar a localizar a verdaderos artistas que tengan algo nuevo que decir. No cabe duda que varios de los ejemplos antes mencionados son éxitos comprobados y posiblemente tengan un lugar de importancia en la posteridad.

Sin embargo, igualmente existen propuestas que no tengan la permanencia ni la calidad que otros. Posiblemente aparezcan nada más para llenar un hueco momentáneo, y se queden como el “sabor del mes” para nunca más saber de ellos.

Con elementos a favor y otros en contra, lo que es una realidad es que este tipo de emisiones han ayudado a la industria de la música, y que esta tendencia parece que llegó para quedarse, al menos hasta que su fórmula termine por desgastarse, situación que según los conocedores, podría llegar pronto.

Pero mientras esto sucede, hay que esperar a la nueva gran estrella latina que surja de alguno de estos programas, pues seguramente alguien de importancia nos espera para el futuro.