I KNOW WHAT YOU ARE, WHAT YOU ARE BABY

Este año claramante el Gonzo’s Place ha estado más tranquilo que en el 2007 cuando este espacio se abrió y tuvo un inicio constante, con todas sus secciones bien establecidas.

Sin embargo, este 2008, con varios cambios laborales y diversas actividades, ha sido un podo difícil mantener el ritmo de información que se publican en este lugar.

No obstante, otra razón muy importante, de la que me acabo de dar cuenta recientemente, es que esa inspiración musical que tuve en el 2007 no se ha hecho presente este año.

Es decir, desde los primeros meses del 2007, ya había propuestas musicales muy interesantes, que incluso trascendieron como Amy Winehouse, Mika, The Gossip, Calvin Harris, Cansai de ser sexy, y un largo etcétera que no vienen a mi mente en estos momentos.

Sin embargo, el 2008 ha estado muy lento…o al menos hasta el momento. Es hasta fines de septiembre que me doy cuenta que efectivamente, en estos meses finales del año están apareciendo o he conocido varios artistas muy interesantes, y otros que ya estaban presentes, están lanzando música nueva que sí vale la pena.

Aunque bien reza el dicho que “el gusto se rompe en géneros”, aquella música que me hace vibrar y sentir algo, debe tener algo especial. No es profundidad para nada, puedo disfrutar muchísimo una canción hueca, sin sentido, mega comercial, pero que a mí me de algo.

Creo que eso a final de cuentas es lo importante en esto de la música, y más ahora que convivo con ella todavía más de cerca que antes.

Poco a poco iré haciendo mis propuestas, mis obsesiones e incluso mis gustos culposos, que por supuesto no desaparecen.

Mientras tanto, dejo aquí el nuevo sencillo de Britney Spears. Mucho se habla de su regreso, aunque ciertamente nunca ha estado alejada de la luz pública, y menos después de todos sus excesos, documentados perfectamente en los medios.

Pero aquí lo que interesa es la música, no los “chismes baratos”, y ciertamente su nuevo sencillo es muy bueno.

Tiene todo para convertirse en un éxito, ritmo, es pegajoso, está muy bien producido, y efectivamente, la voz de Britney Spears es lo de menos.

Pero olvidémonos de la pose intelectual, y mejor pongámonos a bailar con Womanizer, lo nuevo de Britney, que una vez más… está de vuelta.