lunes, 22 de enero de 2007

PERSONAJE DE LA SEMANA: TOM TYKWER

El cine es conocido coloquialmente como el séptimo arte. Y efectivamente un verdadero arte es el poder transmitir en imágenes un cúmulo de sentimientos, emociones, pensamientos, e incluso olores.

La película “El Perfume: Historia de un Asesino”, basada en la obra de Patrick Süskind publicada en 1985, ha sido acertadamente adaptada a la pantalla grande, e incluso la crítica especializada ha coincidido en aceptar, que el más grande logro de esta cinta, es la forma en la que la obra literaria fue adaptada, permitiendo transmitir la esencia principal de la misma: los olores, a través de imágenes.

Este gran logro, fue posible gracias a la visión, conocimiento y pasión que el realizador alemán Tom Tykwer ha desarrollado a lo largo de su corta pero fructífera carrera. A pesar que muchos cineastas como los franceses Jean-Jacques Annaud y Jean-Pierre Jeunet estuvieron considerados para realizar la versión cinematográfica de la novela, e incluso se manejó el nombre de Johnny Depp para ser el protagonista, posiblemente el resultado no hubiera sido el mismo, si su realización hubiera estado a cargo de otra persona que no fuera Tykwer.

La trama de “El Perfume: Historia de un Asesino” está ubicada en la Francia del siglo XVIII y cuenta la historia de Jean-Baptiste Grenouille, un niño nacido bajo el mostrador de un puesto de pescado en un mercado de París, poseedor del olfato más sensible en la historia del mundo, pero carente de olor propio.

Es precisamente su sentido del olfato el que le lleva a cometer su primer crimen: una joven cuya exquisita esencia le hace perseguirla por las calles de París y que, en un torpe intento de capturar su olor, asesina de manera casi involuntaria, perdiendo para siempre ese maravilloso aroma. A partir de entonces Grenouille (que parece llevar la desgracia tras de si, ya que todo aquel con el que convive tiene un final trágico) se dedica a aprender el oficio de perfumista con el objetivo de descubrir un método para capturar ese olor.

Tras unos meses en el laboratorio del perfumista Baldini, que le enseña el funcionamiento del alambique, Grenouille parte hacia Grasse con el objetivo de aprender nuevos métodos para retener los aromas. Sin embargo, al ir alejándose de la ciudad, se da cuenta de lo molesto que le resulta la humanidad y sus mundanos olores, por lo que se dirige al sitio más alejado posible del hombre y allí vive durante siete años, regocijándose en el recuerdo de las fragancias que conoce y que archiva en su mente de manera meticulosa.

Es entonces cuando Grenouille se da cuenta de la ausencia de un olor propio, de su esencia. Obsesionado con encontrar un olor propio parte nuevamente hacia Grasse y tras varios experimentos con diferentes combinaciones decide crear el perfume máximo, aquél formado con la esencia de las jóvenes que más amor despiertan entre los hombres, convirtiéndose entonces en un asesino sistemático de muchachas vírgenes a las que les extrae su olor, logrando así un perfume tan maravilloso que puede dominar el amor de los humanos.

La adaptación cinematográfica fue estrenada el 14 de septiembre de 2006 en Alemania, convirtiéndose inmediatamente en la más taquillera del país europeo con alrededor de un millón de espectadores en su semana de estreno. Poco a poco, la cinta ha llegado a diferentes partes del mundo, en donde ha corrido con similar suerte, tanto por parte de la crítica, como del público, quien ha acudido ávidamente a las salas a ver la cinta.

Pero, ¿quién es Tom Tykwer? Es un cineasta alemán nacido en 1965 en la población de Wuppertal. “Peter Pan” fue probablemente la primera película que él vio, y él dice que la fantasía joven de crear un mundo paralelo mágico sigue siendo una inspiración a este día.
Su primer contacto con el público internacional lo logró en 1998, con lo que fue su quinta película, que cambió para siempre la forma en la que el cine moderno es concebido, con una historia no lineal, una cinematografía cargada, rápida, llena de contrastes, y un argumento interesante, fluido y rápido sin posibilidad de parar por un momento.

Me refiero por supuesto a Corre Lola Corre (Lola Rennt), cinta que a la fecha sigue siendo referencia obligatoria para cualquier joven con interés por ingresar al mundo audiovisual.

El largometraje de poco menos de 90 minutos nos relata la historia de Lola, joven que hace todo lo posible para salvar a su novio, aunque los resultados no sean los esperados; no obstante hay más de una oportunidad, y las posibilidades por cambiar el destino y tener un final feliz, pueden convertirse en una realidad alterna gracias a la magia del cine.

Dos años después, Tykwer regresa a la pantalla grande, de la mano de su musa de aquel entonces: Franka Potente, la misma Lola, con quien vivió un intenso y largo romance, tanto en el aspecto personal como profesional, fue convertida ahora en una princesa contemporánea en la cinta “La Princesa y El Guerrero” (Der Krieger und die Kaiserin). Esta cinta carece de la rapidez visual de Corre Lola Corre; sin embargo, el estilo del director está impregnado en las imágenes, actuaciones, lugares y en general dentro de la historia.

Tal vez después de la sorpresa que fue Corre Lola Corre, el público general pudo sentirse extrañado por el curso que tomó Tykwer, sin embargo, podría decir que personalmente prefiero a “La Princesa y el Guerrero”, con todo y su compleja historia de amor, que nos lleva a una clínica de enfermos mentales, a la realización de un gran robo bancario, y a las obsesiones que podemos generar hacia personas por las simples coincidencias de la vida.

Desapercibida para muchos al no contar con tanta difusión como su cinta anterior, la mejor recomendación cinematográfica para este espacio debe ser sin lugar a dudas “La Princesa y El Guerrero”, que aunque difícilmente, todavía puede ser conseguida.

Es precisamente este estilo el que pude observar durante la proyección de “El Perfume”. Y si bien es una cinta de época, un poco “lenta” en su principio, y sin muchos de los excesos que el mismo Tykwer creó, la transformación de las palabras y olores del libro, a las imágenes y olores de la pantalla grande, es un verdadero éxito que solo pocas personas pudieron haber sacado adelante.

Afortunadamente tenemos a Tom Tykwer, y esperamos que este personaje de la semana pueda seguir sorprendiéndonos más adelante con más trabajos excepcionales, como aquellos a los que ya nos está acostumbrando.

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